“Notas sobre el ‘habla’ - ALEJANDRA PIZARNIK



Angustias metafìsicas ‘laicas’: ¿Quién es el yo? Esto lleva a nada pues el yo no existe. Existiría si fuera profesora de filosofía y pudiera sonreir con ironía por esta pregunta que se hicieron tantas mentalidades poderosas.
Mi estilo es o será, por fuerza, artificioso. A causa del vacío, a causa de tu imposibilidad de apoderarte del lenguaje. El lenguaje me es ajeno. Ésta es mi enfermedad. Una confusa y disimulada afasia. De allí que no pueda oír música. De allí mi facilidad por aprender canciones en idiomas que no sé. Enfermedad de la atención o el enajenamiento. Todo tiene nombre pero el nombre no coincide con la cosa a la que me refiero. El lenguaje es un desafío para mí, un muro, algo que me expulsa, que me deja afuera. Nunca he pensado con frases. Apenas unas pocas palabras que zumban desde mi infancia. Por ejemplo éstas -que en el fondo es una frase harapienta-: ‘Sí, pero lo que yo quería decirle es que…’. Cuando era niña la completaba con palabras inventadas, con un idioma imaginario. Lo que nunca pude es percibir el ritmo del lenguaje, ni ningún ritmo. Cuando leo, leo cada palabra aislada, aún las preposiciones como si estuviera realizando una autopsia. Ello deriva de mi inercia psíquica. Del miedo. En fin, ya es demasiado tarde. (…)
Alejandra Pizarnik
6 de noviembre de 1962, fragmento.
En: Pizarnik, Alejandra. Diarios. Barcelona: Lumen, 2003

Alejandra Pizarnik

29 de abril de 1936 – 25 de septiembre de 1972